Hay varios motivos por los que debemos plantearnos un rediseño web, y en este post te damos unos cuantos que te harán pensarlo al menos.

Seguramente tu actual página web te costase mucho trabajo, tiempo e incluso dinero en su día, pero si no te está dando los resultados que esperabas, no te aferres a ella y plantéate un rediseño web.

El tiempo va pasando y con él cambian las modas y tendencias también en diseño web, pero sobre todo, va evolucionando la forma en la que los usuarios se manejan por Internet y las expectativas que tienen de cada sitio que visitan.

Esta evolución obliga a las empresas, y a sus páginas web, a adaptarse para estar a la altura de lo que sus usuarios esperan de ellas. Debido a esto, cosas como la experiencia de usuario, la usabilidad web, o las webs que se adaptan a dispositivos móviles, se han convertido en los protagonistas de un tiempo a esta parte.

Una web con unos cuantos años de solera seguramente se haya quedado obsoleta, y por tanto, no estará dando los resultados que debería. En realidad, darnos cuenta de que nuestra web no es efectiva y que está algo anticuada no es motivo de disgusto sino todo lo contrario, pues supone la oportunidad perfecta para plantearnos un rediseño web que vaya más allá de la estética y que así consiga buenos resultados.

Hay varios motivos por los que es buena idea decir adiós a nuestra vieja web y dar paso a una versión mejorada y optimizada de la misma, y aquí os hablamos de 7 de ellos:

DISEÑO

Nuestra web es la cara visible de nuestro negocio y muchas veces será lo primero que nuestros potenciales clientes vean de nosotros. Debemos preguntarnos si la primera impresión que ellos se formarán de nuestra empresa es la correcta, y si no es así, está claro que necesitamos un rediseño web. Por otro lado, si hemos decidido rediseñar o modernizar nuestra identidad corporativa, nuestra web también debería hacerlo, ya que un diseño desactualizado o descuidado, puede hacernos perder clientes.

FUNCIONALIDADES

La forma en la que se desarrollan y funcionan las páginas web ha cambiado mucho en los últimos años. Ahora son más seguras, tienen un mejor rendimiento, son mucho más atractivas visualmente y sobre todo, cuentan con una mejor experiencia de usuario. Si nuestra página no tiene todas esas cosas, ha llegado la hora de ir pensando en un rediseño web.

VELOCIDAD

¿Tu página web no es tan rápida como las de tu competencia? Toca rediseño web. Los usuarios actualmente no quieren esperar para ver la información que les interesa, así que si nuestra web tarda mucho en cargar y les hacemos esperar demasiado, lo más probable es que se vayan a otra parte.

SEO

Otro de los factores decisivos al plantearnos hacer un rediseño web es el hecho de que nuestra web esté, o no esté, optimizada para SEO. De nada sirve tener una web de lo más atractiva y funcional si nuestros potenciales clientes no la encuentran. Por este motivo, si nuestra página web no está optimizada, lo mejor es diseñar una que sí lo esté desde el principio. Además, uno de los factores que influyen en el posicionamiento web es la frecuencia con la que actualicemos nuestros contenidos, por lo que debemos plantearnos tener una web en la que podamos renovar y añadir contenidos nuevos frecuentemente.

USABILIDAD

Cada vez es mayor el número de usuarios de Internet que están acostumbrados a navegar y buscar por diferentes páginas. Esto hace que la usabilidad sea prioritaria a la hora de rediseñar una web, ya que si la hacemos complicada en su manejo, con una mala organización de los contenidos, o colocamos los diferentes elementos que contenga en sitios en los que el usuario no espera encontrarlos, seguramente se irán antes de que nos demos cuenta.

ADAPTABILIDAD

De todos los usuarios que utilizan Internet ¿cuántos crees que se conectan desde sus móviles? Suficientes como para que nuestra web se vea correctamente en ellos. Hoy en día tener una web que no se adapte a todos los dispositivos es tener una web que desperdicia oportunidades de negocio, y motivo más que suficiente para plantearse un rediseño web.

CONTENIDO

Si tu web ya tiene unos años es muy posible que los contenidos que actualmente querrías poner en ella no sean los que contiene. También es posible que la organización de los mismos no sea la más adecuada, y qué mejor momento para organizar y renovar nuestros viejos contenidos que un buen rediseño web. Así, además de introducir información sobre los nuevos productos o servicios que tengamos, podremos redactarlos de cero, teniendo en cuenta tanto el SEO como el engagement.

El objetivo de una página web es dar a conocer nuestros servicios y productos, pero sobre todo busca convertir visitas en clientes. Si con la tuya no lo hace, puede que sea por alguno de los motivos anteriores, pero no te desanimes y aprovecha la gran oportunidad de mejora que te ofrece un rediseño web :)

Imagen cortesía de Shutterstock.