Las redes sociales funcionan, por lo menos a nivel de marketing. Eso dice el estudio ‘Putting social media to work’ de la consultora Bain & Company.

Según parece, las empresas que mantienen contacto en redes con sus clientes, consiguen hacerles más fieles a la marca y que compren un 40% más. Pero estos clientes que responden de manera tan positiva no se regalan a la empresa: cada vez reclaman una atención de mayor calidad, más personalizada y más instantánea y como agencia de social media lo sabemos.

Las valientes que se lanzan al ruedo 2.0 están viendo ya sus frutos, y la distancia que las separa de las que esperan en el burladero se hace cada día mayor. Muchas empresas se han dado cuenta del filón, y algunas de las más importantes (American Express, Starbucks, Dell o Wal-Mart) llegan a invertir cada año decenas de millones de dólares en sus estrategias de marketing online.

Como conclusión del estudio, ofrecen 5 claves importantes que debería tener en cuenta toda empresa que quiera plantearse una presencia sostenible en redes sociales:
1. Marcar unos objetivos concretos. Es necesario establecer de manera adecuada y previamente al comienzo de la estrategia, cuáles son los objetivos de marketing a cumplir y qué es lo que se pretende conseguir. Estas metas deberán ser concretas y cuantificables para poder evaluar resultados.

2. Focalizarse en el público objetivo. El estudio demuestra que un usuario medio sigue en Facebook a un máximo de 7 marcas, lo que significa que es selectivo y sólo acepta información comercial de unas pocas empresas que le resultan interesantes. Lo menos práctico es lanzarse a la búsqueda de fans y followers a granel porque es muy probable que nuestro mensaje no vaya a ser relevante para todos ellos, y estaríamos desperdiciando impactos.

3. Movilizar un equipo que gestione y evalúe las acciones en redes. Las empresas que mejores resultados están obteniendo en redes sociales tienen todo un equipo de profesionales (marketing, ventas, RRPP, atención al cliente) dedicado a analizar cada paso que se da y cada decisión que se toma. En el caso de las pequeñas y medianas empresas que no cuentan con un equipo tan nutrido, la solución más factible pasa por contratar los servicios de profesionales que gestionen sus redes de manera eficiente.

4. Monitorizar y medir los resultados constantemente. Este punto está estrechamente relacionado con el primero y aconseja evaluar si efectivamente se está generando una aproximación a los objetivos marcados.

5. Ser flexible y adaptativo. Las redes sociales son un mundo en constante cambio y completamente nuevo para todos, incluso para los que trabajan en ello. Se trata de una oportunidad de aprendizaje constante y por tanto casi nada está inventado aún en este campo, ni existe una única forma de recorrer el camino.